Domingo Batista
En el año 2011, en la última parte de la gestión del presidente Leonel Fernández, el Ministerio de Educación de la República Dominicana (MINERD) inició la implementación del programa denominado Jornada Escolar Extendida (JEE).
Inmediatamente el licenciado Danilo Medina asumió la Primera Magistratura de la Nación, en el año 2012, asumió el compromiso de asignar el cuatro por ciento del presupuesto nacional a la educación y planteó la Jornada Extendida Escolar como una de las principales prioridades de su gobierno.
Para la ejecución de ese programa, el expresidente Fernández y el Presidente Medina se apoyaron en el mandato de la Constitución de la República que manifiesta la obligatoriedad de la educación. Además, de la ley número1-12, sobre la Estrategia Nacional de Desarrollo 2010-2030.
Otros dispositivos en los que se afianzaban tienen que ver con la Ley General de Educación número 66-97; el artículo 45 de la ley 136-03, que establece el Código para el Sistema de Protección y los Derechos Fundamentales de los Niños, Niñas y Adolescentes, así como los temas referentes a los compromisos y acuerdos nacionales e internacionales suscritos por el país.
De igual modo, el MINERD, bajo la dirección de los ministros Josefina Pimentel y Carlos Amarante Baret, respectivamente, establecía el desarrollo de la Jornada Escolar Extendida como herramienta para impulsar el Plan Decenal de Educación 2008-2018 y el Pacto Nacional por la Reforma Educativa en el país para el período 2014-2030.
Al hacer una evaluación de los primeros años de la aplicación del JEE, la maestra Ana Contreras, decana de la Facultad de Ciencias de la Educación, considera que el programa es altamente beneficioso para el país.Estima que los sectores pobres son los que mejor provecho sacan de la Jornada Escolar Extendida, debido a sus precariedades económicas.
Reflexiona que un segmento amplio de los hogares dominicanos tiene inconvenientes para nutrir a sus hijos, pero que la Jornada Escolar Extendida ayuda indirectamente -en ese sentido- a los padres. En las escuelas, argumenta la docente, los estudiantes tienen acceso al desayuno, almuerzan y deben recibir merienda, lo que conlleva una grata repercusión financiera.
La decana de Educación de la UASD cree que la medida aplicada por el MINERD tiene también un impacto impresionante en el aspecto de la seguridad ciudadana. A su entender, el hecho de que los alumnos permanezcan largas horas en los centros escolares hace que sus familiares tengan tranquilidad porque saben que estos están seguros y ajenos a cualquier atentado delincuencial, por ejemplo.
No obstante sus elogios al programa de Jornada Extendida Escolar, la facultativa académica dijo que era necesario que las autoridades educativas gubernamentales hagan una evaluación al proceso llevado a cabo para la aplicación de ese proyecto.
Recordó que siempre es de buen juicio hacer una evaluación amplia (cada cierto tiempo) a los planesque se pongan en marcha en cualquier organismo.
En ese sentido, sugiere que el gobierno -con el MINERD a la cabeza- convoque a las diferentes instancias educativas para que revisen sus resultados.
La más alta funcionaria de la Facultad de Ciencias de la Educación considera oportuna la creación de condiciones para la implementación de los diferentes renglones.
Debe determinarse con precisión el número de docentes y técnicos requeridos en áreas como orientación, educación física, artes y otras actividades, en un análisis reflexivo de la Jornada Escolar Extendida, según explica la maestra Contreras.
De igual manera, destaca que los aspectos pedagógicos no deben obviarse a la hora de la revisión.
Alega que el maestro no sólo debe ser experto en su área de formación, sino que también debe dominar las estrategias para enseñar lo que ha aprendido.
Resalta que el programa es bastante amplio y abarca aspectos de gran trascendencia académica, por lo que exhorta a las autoridades educativas gubernamentales a desplegar cuantos esfuerzos sean necesarios para impulsar una rica discusión al respecto.
Aduce que “nosotros nos identificamos plenamente con el desarrollo del programa de la Jornada Escolar Extendida, pero reconocemos que hay fallas que se deben corregir”.
Refiere que sus observaciones están hechas sobre la base de las mejores intenciones para que la sociedad dominicana resulte altamente beneficiada con un proyecto de tanta importancia como ese.
Alegó que -en un principio- los sectores involucrados en la formación docente no fueron debidamente tomados en cuenta, pero que el MINERD tiene ahora las posibilidades de enmendar ese error.
Indicó que “independientemente de que estamos conscientes de los beneficios que recibe la población nacional con la puesta en ejecución de la Jornada Escolar Extendida, estimamos que se hace vital un certero análisis de sus resultados”.
En ese sentido, la maestra postula la necesidad de que el MINERD realice diferentes eventos que concentren las voces autorizadas de las instituciones que tienen que ver -efectivamente- con la responsabilidad de formar los recursos humanos del JEE.
Puso de relieve que -primeramente- ese proyecto debió impulsarse a través de las distintas facultades de las universidades nacionales, para tener un mayor consenso por parte de los hombres y mujeres que están entregados a la causa de la enseñanza.
Apunta que uno de los fallos arrojados en los primeros años del JEE tiene que ver con que muchos de los planteles escolares -realmente- no cumplen con los rigores que impone el mantenimiento de los alumnos en un horario extendido.
Entiende que en las evaluaciones se tiene que tocar -igualmente- lo que es el currículo que debe normar esa auspiciosa jornada.
Finalmente, insiste en la necesidad de un trabajo de revisión que involucre a todos los sectores, de tal manera que puedan identificarse y superarse cualesquiera deficiencias que limiten el desarrollo del trabajo docente en los recintos escolares incorporados a la Jornada Escolar Extendida.