“El compromiso de nuestra gestión es con el establecimiento de una nueva filosofía administrativa, basada en el cumplimiento de las disposiciones gubernamentales que promueven el ejercicio ético en la administración pública”, así lo expresó el rector Beltrán al ser consultado sobre las motivaciones que orientan su accionar en sus primeros días de gestión.
A través de diferentes comunicaciones dirigidas a sus funcionarios, Beltrán promueve un programa de transparencia institucional, con el propósito de que ningún ejecutivo de la Academia olvide su responsabilidad en ese sentido.
Entre las disposiciones emitidas se encuentra la implementación de una auditoría al proceso de compras de combustibles para la institución, en procura de eliminar las intermediaciones que regularmente incrementan el precio por cada galón.
De igual forma, instruyó a los funcionarios que por su investidura les corresponde, iniciar el debido proceso de declaraciones juradas de bienes, como establece la Ley 311-14.
Asimismo, dispuso el fiel ceñimiento a las reglas éticas emanadas de la Dirección General de Ética e Integridad Gubernamental (DGEIG).
Las medidas antes señaladas están contenidas en las disposiciones 2022-003, 2022-004 y 2022-005, aprobadas por el rector Beltrán, en las que resalta la necesidad de que todos los ejecutivos de la institución cumplan cabalmente con los preceptos señalados.
El funcionario fue enfático en el compromiso de optimizar los recursos económicos y no violentar ningún aspecto relacionado con el buen proceder, la diafanidad y transparencia.