La Facultad de Ciencias Agronómicas y Veterinarias de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, junto a la Universidad de León, España, implementa un programa de desarrollo de productos probióticos que son transferidos al sector agrario dominicano de la región Sur. Los probióticos de plantas son abonos elaborados con base en bacterias y hongos que ayudan a la fijación del nitrógeno en hojas, tallos y raíces, sin necesidad de recurrir al uso de fertilizantes químicos.
“Innovación para el desarrollo de la cadena de valor de productos agroalimentarios estratégicos para la República Dominicana” ha permitido, en concreto, el desarrollo de dos productos para dos tipos de cultivos diferentes, como son: leguminosas y bananos.
César Antonio Díaz Alcántara, Juan Araujo y Fernando González-Andrés, son los representantes locales e internacional de las entidades involucradas en la ejecución del proyecto.
Hablando en entrevista exclusiva para El Universitario, César Antonio Díaz explicó que en el caso de los productos para cultivos básicos de leguminosas (gama Legu Dom) tienen como misión la fijación del nitrógeno de la atmosfera, como sustituto del abono con nitrógeno mineral. Además, se aplica en productos para banana (gama Legu Dom), cuya misión es la estimulación de las defensas naturales de las plantas para protegerse del hongo sigatoka negra (Mycophearella Fijiensi) y mejorar la cosecha.
Los productos probióticos son producidos a nivel piloto, en el Laboratorio de Biología Molecular de la Facultad, por medio de un fermentador con capacidad para producir una buena cantidad de abono para usar a nivel de fincas agrarias.
En esta primera fase participan más de 150 productores de las provincias San Juan y Azua, que se dedican al cultivo de las leguminosas habichuela (Phaseolus vulgaris ) y guandúl (Cajanus Cajan L. (Milps); así como del banano, aunque los ejecutores pretenden un efecto multiplicador y transferir dichos conocimientos a un mayor número de destinarios.
Las autoridades de la UASD, representados por los especialistas de la Facultad de Ciencias Agronómicas y Veterinarias, funge como coordinadora local del proyecto y por tanto, es la responsable de su ejecución.
Junto a la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), participan de forma local el Instituto Dominicano de Investigaciones Agropecuarias y Forestales (IDIAF), PROYECTA SL y el Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (MESCyT). Mientras, que las autoridades españolas involucradas son la Universidad de León, Bioenergía y Desarrollo Tecnológico (BYDT), y la Universidad de Valladolid; y cuentan con la financiación por parte de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, AECID.
El proyecto, que en concreto empezó a implementarse en el año 2015, finalizará este mes de marzo de 2018.
“No obstante, es importante aclarar que el equipo de trabajo formado por todos los socios de este programa, más la Universidad de Salamanca, en España, llevan trabajando desde 2007 en la generación de conocimiento sobre productos probióticos de plantas, y parte de esos conocimientos son los que se han transferido a los agricultores con el proyecto”, destacó Juan Araujo, docente de la FCAV y parte del equipo ejecutor del proyecto.
Explicó que desde 2007 el equipo de trabajo ha contado con financiación del MESCyT y de AECID (España).
La representación dominicana que forma parte del proyecto está compuesta por los maestros César Díaz, Felipe Vicioso, Ángel Pimentel, Iris Marcano, Juan Cedano y Juan Araujo.
Mientras, que la parte Española la componen: Fernando González-Andrés, Arsenio Terrón, Antonio Moran, Xiomar Gómez, Beatriz Urbano, Daniel Blanco y Rubén González.
Impacto del proyecto
A través de la implementación del proyecto “Innovación para el desarrollo de la cadena de valor de productos agroalimentarios estratégicos para la República Dominicana” se ha logrado transferir al sector agrario los trabajos de investigación y desarrollo que realiza el grupo del Laboratorio de Biología Molecular de la Facultad de Ciencias Agronómicas y Veterinarias de la UASD, junto con sus socios del proyecto.
“Estos productos cumplen varias misiones, como son:
• Ahorrar en gastos para el agricultor, porque sustituyen al comercial abono de nitrógeno en los cultivos básicos de leguminosas, y son más económicos
• Reducir las necesidades de uso de productos químicos contra la Sigatoka, y como son más económicos que dichos productos ahorran, también en este caso, en gastos para el agricultor.
• Mejorar las cosechas, incrementando los ingresos de los agricultores; generar empleos en el país, ya que la tecnología que se ha producido de manera conjunta entre la Universidad de León en España y la UASD, es ahora explotada por la UASD.
• Generar un beneficio extra al medio ambiente, ya que son productos que no causan ningún tipo de daño al ecosistema.